Una secta es cualquier grupo religioso que difiere significativamente en uno o más aspectos en cuanto a la creencia y práctica de los grupos religiosos que son considerados como expresiones normativas de la religión en nuestra cultura total. Esta excelente definición que da el libro sirve de principio en la clasificación de las sectas que discute: sectas seudocristianas, sectas que son distintivamente orientales, sectas hindu-cristianas y sectas que son cultos a la personalidad del dirigente o fundador.

Desde la perspectiva cristiana, Irvine Robertson, el autor, ofrece también sugerencias sabias, basadas en la experiencia, para tratar con un sectario. Además, hace una presentación concisa de las doctrinas principales del cristianismo ortodoxo, con amplias listas de textos bíblicos que las respaldan, pues en ellas principalmente difieren las sectas. Cinco doctrinas, advierte el libro, son falsamente enseñadas por la mayoría de las sectas: La doctrina de la Trinidad, la doctrina de la deidad de Jesucristo, la doctrina de la personalidad del Espíritu Santo, la doctrina de la inmortalidad del alma y la escatología o doctrina de las últimas cosas.

Al discutir cada secta principal el autor presenta datos históricos de su fundación y de su fundador, las fuentes de autoridad que se le atribuyen, las principales doctrinas y sus diferencias con el cristianismo ortodoxo.

La utilidad del libro bien puede encerrarse en esta frase del mismo libro: “Es de desearse que la conversación no solamente callará el testimonio de ellos (los sectarios), sino que también los ganará para el conocimiento salvador de nuestro bendito Señor Jesucristo”.

LIBROS AFINES
• Evidencia que demanda un veredicto, J. McDowel
• Las religiones del mundo, N. Anderson.